Me encontre esta imagen en Facebook:
Gracias a esta imagen, me he dado cuenta que en todos mis intentos de relaciones románticas, lo único que he hecho, es estar mendigando, lo cual tiene que parar. Ya no quiero estar suplicando por amor, cariño o apoyo; el sexo es lo de menos. Lo mínimo que pido es alguien que no le de miedo darme un abrazo u otra muestra de afecto en la calle o en cualquier otro lugar. ¿Es mucho pedir? No lo creo. Pero parece que en la ciudad donde vivo, todavía estamos a principios del siglo XX o en la prehistoria. Pero lo que sí es cierto, es que de ahora en adelante, nada de andar mendigando amor.